- En nuestros locos intentos, renunciamos a lo que somos por lo que esperamos ser.
- El amor de los jóvenes no está en el corazón, sino en los ojos.
- La conciencia es la voz del alma; las pasiones, la del cuerpo.
- Ocurra lo que ocurra, aun en el día mas borrascoso, las horas y el tiempo pasan.
- El amor alivia como la luz del sol tras la lluvia.
- Duda que sean fuego las estrellas, duda que el sol se mueva, duda que la verdad sea mentira, pero no dudes jamás de que te amo.
- Si no recuerdas la más ligera locura en que el amor te hizo caer, no has amado.
- El amor corre hacia el amor, como los escolares huyen de los libros; pero el amor se aleja del amor, como los niños se dirigen a la escuela, con ojos entristecidos.
- Guarda a un amigo bajo la llave de tu propia vida.
- Malgasté mi tiempo, ahora el tiempo me malgasta a mí.
- Había una pequeña chica que nunca conoció el amor, hasta que un chico le rompió el corazón.
- El amor no mira con los ojos, sino con el alma.
- Lloramos al nacer por tener que entrar en este gran escenario de locos.
- Algunas caídas son el medio para levantarse a situaciones más felices.
- Es mejor ser rey de tu silencio que esclavo de tus palabras.
- De lo que tengo miedo es de tu miedo.
- Las palabras están llenas de falsedad o de arte; la mirada es el lenguaje del corazón.
- El destino es el que baraja las cartas, pero nosotros somos los que jugamos.
- Es más fácil obtener lo que se desea con una sonrisa que con la punta de la espada.
sábado, 20 de noviembre de 2010
Shakespeare Apasionado #
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