Les facilito una pista,
fue cuando llegué a esta vida.
Me dieron tal bienvenida,
fue amor a primera vista.
Con ese abrazo sin tiempo
sellaste todo el sentido
de que hoy, estés donde estés,
yo me sienta protegida.
Eligiendo a contramano
fuiste rifando tesoros,
perdiendo el oro y el moro,
perdiendo el control y el mando.
Fueron tiempos en los que círculos
viciosos enredaron nuestra pasión.
Vos te tomaste a pecho todo,
yo alimenté violentos modos,
y en el fondo ¡encontramos amor! ¡Ese eterno amor!
Si le decís: “no se puede”,
ella escucha: “no se quiere”.
Si decís: “crisis” o “lío”
Ela escucha: “desafío”.
Y hoy te abusas de tus ojitos y
tu sonrisita angelical
para violar cualquier obstáculo
que te impida sentirte bien.
Más que una pista ya les di la información,
¡amo a la reina del perdón!
Siempre está lista para aprender algo más.
Con tu convicción…
Paco y Dora abrazados lloran de admiración.
Orgulloso de ser tu hija estoy, ¡te amo,
Diosa de la transformación!
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Gracias por comentar (: